martes, 29 de diciembre de 2015

"A VECES LA VIDA TAMBIÉN ES ROSA"


"A VECES LA VIDA TAMBIÉN ES ROSA"

Bueno desde este rinconcito mío aquí en la red, deseo mandar un mensaje positivo al mundo y especialmente a los que me rodean, que son los que me sufren.

Este es un escrito con sabor a triunfo, porque no todo ha sido negro en mi vida. En ella ha habido, hay y habrá momentos pintados de un luminoso blanco y si me apuras hasta de un gracioso color rosa chicle, y va dedicado a mi familia y en especial a mi hermana, que el otro día me dijo que algo dentro de ella se rompe cada vez que publico alguno de mis escritos, bueno no lo dijo con esas palabras, pero intuyo que quería decir algo parecido.

Si alguno de vosotros ha leído "RATÓN DE ARMARIO", sabrá que mi llegada al mundo no fue fácil, ¿sería un presagio de lo que me esperaría a lo largo de la vida?, no, no lo creo, creo que me convertí en lo que soy desde que empecé a luchar en el útero de mi madre.

Muy jovencito, aproximadamente con dos años, en una vacuna rutinaria la enfermera me "pinchó" en el nervio ciático (casi pierdo la pierna....), a los cuatro años y después de una dura rehabilitación le recomendaron a mi madre la práctica de algún deporte.

Ahí comenzó mi andadura en el mundo del deporte, la cual no ha terminado a día de hoy 32 años después, he practicado muchos con mayor o menor fortuna, natación, baloncesto, fútbol, atletismo, esquí, taekwondo, etc, etc.

Mi niñez fue plena, a falta de unos padres que me "criaran", pues los dos trabajaban como auténticos mulos, me vi rodeado de un hermano y una hermana mayores, que si bien me hacían rabiar cuando era pequeño, (supongo que por la novedad de tener un muñeco en su casa, a la edad de 13 y 11 años respectivamente), luego me dieron sus juegos, su tiempo y su paciencia, su cariño y sus castigos.

Podría contar mil anécdotas, recuerdo cada una ellas con una perfección que a veces me asusta. Muchas horas en la terraza jugando con una pelota al juego de "a la una la aceituna, a las dos el reloj...., por la noche luchando contra las olas subidos en una barca imaginaria en un juego que siempre tenía el mismo final mi hermano muerto y yo llorando. Cuando mi hermana me hacía correr alrededor de un parque solo para poder estar a solas con su novio, actualmente su marido, o el truco del 4L del botón imaginario que apretaba un imaginario turbo, mientras acompañaba a mi hermano en busca de su novia, actualmente su mujer, para ellos mención especial también, pues "soportaron" a una criaturilla sin decir una palabra más alta que la otra, recuerdo a mi cuñado pacientemente hacer una voz que me hacía mucha gracia todas y cada una de las noches, noche tras noche, no en serio, noche tras noche, o a mi cuñada defendiéndome siempre, siempre, siempre de las broncas de mi hermano o como me hacía palomitas en sartén porque me gustaban mucho, o como le encantaba tocarme el culo y decir "Ay!! que culo tiene mi cuñadito!! y es que es verdad tengo un culito!!...Pero tampoco es plan de aburrir más al personal de lo que estoy haciendo ahora.

Ambos se casaron cuando yo tenía 12 años, (cada uno con sus respectivos, no somos una familia tan rara), ahí entro en juego otra faceta actual de mi vida, mi imaginación, yo me vi solo en casa, y jamás me aburrí, era capaz de pegar un chicle desde el brazo del sofá hasta la mesa y con ayuda del sofá realizar el salto de altura, hasta construirme una canasta de baloncesto con una caja de zapatos, bueno también me dio por prender fuego a aviones de papel y tirarlos por la terraza o clavar cuchillos desde lejos en libros....cada uno tenemos nuestras cosas.

He conocido tres veces el amor, desde mi primer beso con 14 años... ya, ya se lo que estáis pensando!!!, siempre he hecho las cosas con calma. Fueron unos años maravillosos y lo mejor de todo es que sigo teniendo relación con aquella niña que en su día me regaló sus labios. Fueron los primeros tonteos, los primeros besos tímidos en un portal, los primeros escalofríos, los primeros regalos, una famosa esclava con mi nombre o esos corazones partidos por la mitad.

Luego vino la primera relación adulta duradera, más de siete años de relación, con una persona que me quiso mucho, es probable que a su manera, pero no dudo habiéndolo vivido desde dentro, que me amó, viví muchos momentos buenos, muchas risas y mucha complicidad.

Y por fin conocí el amor verdadero, sin miramientos, sin condiciones, sin muebles, sin tiempo, sin dinero, sin viajes, solos ella y yo, el amor correspondido en todas sus variables, suficiente para mirarnos y amarnos. Cuatro años de respeto, de admiración, de cariño, de sacrificios, de amor puro, de luces y sombras, sombras perdidas en la oscuridad y luces que aún alumbran mi camino. Cuatro años de amar hasta doler, cuatro años de amar hasta perder.

No he viajado mucho pero no puedo decir que no conozca mundo, he estado en Roma, París y en Londres y en muchísimas ciudades de España.

He tenido muchos amigos a lo largo de mi vida y muchos conservo actualmente, compañeros de camino que en algún momento se bajaron de mi tren pero que me hicieron maravilloso el camino. He sentido de cerca su aliento y su ayuda, en especial la de tres personas, ellos saben quienes son. Y a ti, gracias por tus llamadas diarias, por tus consejos, por tu cariño y amistad, por tus salidas de marcha, por tus "areneros", por tus carcajadas descontroladas después de llevar el anillo a Mordor y el silbido de un bote de gas, gracias por acompañarme cada uno de mis días.

He cumplido varios sueños, desde montar mi propio negocio, hasta tener una moto gorda, podría decirse que todo lo que me he propuesto en la vida lo he conseguido.

Me independicé con 25 años y he vivido de todas las maneras que os podáis imaginar, solo, con amigo, con pareja, con amiga e hija, con conocida e hijos, con follamiga....creo que no se me ocurren más compañías para compartir piso.

Siempre he tenido trabajo, no se lo que es estar parado, nada más que quince días en toda mi vida laboral y en ellos he conocido compañeros que me han valorado, me han querido y me han dado su cariño y detalles muy especiales, por ejemplo una persona que primero fue compañero, más tarde jefe y que a día de hoy y 11 años después se sigue preocupando porque esté lo mejor posible. O mis compañeros actuales los cuales dados mis problemas económicos me regalaron entre todos unas ruedas para el coche así porque sí, con una nota que decía que unas ruedas no frenen tu camino... gracias.

Y con esto y mucho más que me dejo en el tintero, quería haceros ver que aunque me da por escribir cuando estoy triste, mi vida ha sido un regalo, un regalo que sin duda aceptaré y una deuda que sin duda pagaré.

Gracias a todos y cada uno de vosotros, porque vosotros habéis marcado mi camino y me dais fuerza para dar pasito tras pasito, NO FIGHT, NO FUTURE.






lunes, 14 de diciembre de 2015

"DEMASIADO LEJOS"

"DEMASIADO LEJOS"

A veces las cosas no son tan sencillas como parecen, como bien me dicen las cosas no son negras o blancas, existen sutiles matices de grises entre medias, lástima que no fui, no soy y no seré capaz de verlos...jodido daltonismo.

Dejas ir lo que más quieres, pensando que se acabará el dolor, y no hace más que agravarse.
Doctor un poquito de más de morfina, pues los bares no son suficientes para olvidar, y el alcohol nunca desinfectará esta herida.

Me dijeron que una buena solución es amputar, pero que hago yo sin un corazón, cansado de latir sí, pero aun latiendo por ti.

Demasiado lejos te envié, demasiado lejos para recuperarte, pero no lo suficiente para olvidarte. Poco me queda, unos zapatos gastados de andar, unos brazos cansados de nadar a contracorriente y demasiados paquetes de tabaco vacíos. 

Oigo tu voz en mis recuerdos y sin embargo eso me aterroriza, temo el día en que te vuelva a ver, porque será la puntilla a mi cuello cansado de mirar hacia abajo.

A veces me siento vivo y me digo eh!! Sergio has sobrevivido, luego me giro en la cama y siento el vació, un vació imposible de llenar, unos ecos imposibles de no escuchar entre medias de un silencio abrumador que me ensordece.

Cuatro paredes me rodean, cuatro paredes cada vez más apretadas, me presionan, me agobian, me enloquecen, una puerta y varias ventanas, ninguna es buena escapatoria.

Tal vez te acuerdes de mi, tal vez llores por mi, tal vez te rías de algún recuerdo. 

Yo daría lo poco que tengo porque la amnesia se acuerde de mi, las lagrimas se sequen y las risas sean cosa del pasado, eso será porque habré logrado olvidarte. 

Demasiado lejos es una cantinela que no cesa en mi cabeza, demasiado lejos....